Argumento de Patricio Antonio.
Estaba yo jugando, cuando de repente me alertaron unos gritos desesperados que provenían de la cocina donde mi mamá nos preparaba el almuerzo, digo nos, porque somos Diego, mi papá y yó “Ticho”.
Los gritos eran nada menos que de un limón... que en esos momentos mi mamá cortaba por la mitad, éste chillaba ... “ ay ay ay... socorro... ¡me matan... no he hecho nada malo! ay ay ay... alguien que me ayude, por favor... no quiero morir.... soy muy chico todavía! .... ay ay ay. Yo me preguntaba. que estaría pasando, por qué tanto grito? Y corrí a averiguar “quién grita así?... y mi mamá dice : “ este limón cobarde que no quiere cooperar con la ensalada que estoy preparando, primero tuve que correr por toda la pieza detrás de las papas que cuando vieron la olla puesta en la cocina, no las pude tomar porque no querían darse un baño hirviendo, entonces se tiraron desde la mesa y se echaron a correr. Uf, pero menos mal que ya están listas y no les di tiempo a gritar, las tiré a la olla y cuando las hice cubitos, ya estaban cocidas y les era imposible decir nada.
Pero ... mira, observa las lechugas, fue una agotadora lucha poder deshojarlas y lavarlas, se pusieron tiesas, ellas no sabían porque, pero como fueron testigo de lo sucedido con los otros integrantes, se pusieron nerviosas e imaginaban que algo malo les pasaría y ahora están arrinconadas en la fuente, abrazadas unas a otras, cubriéndose de la sal y el jugo de limón que ya se les viene encima.
Resumiendo el cuento... “lloraban las lechugas, chillaba el limón y tuvimos que esperar que los lamentos terminarán para poder ... el papá, la mamá, Diego y Yo servirnos y saborear al fin esta deliciosa ... “ Ensalada Rusa”.
Año 1998.
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